Estados Unidos aprueba la Ley GENIUS y Ley CLARITY: un doble hito para la regulación cripto y financiera

22.07.2025

EEUU, ECONOMÍA

Estados Unidos aprobó las leyes GENIUS y CLARITY, un paquete clave que regula stablecoins y activos digitales. El nuevo marco abre el juego a bancos y fintechs, institucionaliza el mercado cripto y refuerza el rol del dólar digital, pero plantea desafíos en su implementación.

La firma de la Ley GENIUS (Guaranteed Electronic Network for Issuing Unreserved Stablecoins) y de la Ley CLARITY marca un antes y un después en la relación entre el sistema financiero tradicional y el ecosistema cripto.
Se trata de la primera normativa federal en Estados Unidos que regula la emisión, el respaldo y el funcionamiento de las stablecoins.
El impacto es inmediato y transversal: afecta a bancos, fintechs, exchanges einversores globales.

Ley GENIUS: lo esencial

A partir de ahora, solo podrán emitir stablecoins las entidades autorizadas por el regulador bancario federal (OCC), incluyendo bancos tradicionales, cooperativas financieras y fintechs con licencia nacional.
Cada stablecoin deberá estar respaldada en proporción exacta (1:1) por dólares o activos líquidos de bajo riesgo, como bonos del Tesoro estadounidense.
La norma establece también un régimen estricto de auditorías independientes, con obligación de publicar mensualmente el detalle de reservas.
En caso de quiebra del emisor, los usuarios tendrán prioridad para recuperar sus fondos, algo inédito en la industria cripto, reforzando la protección al consumidor.
Además, la gobernanza de la norma se compartirá entre supervisores estatales y federales, generando un esquema de doble control.

Efecto inmediato en el mercado

El mercado reaccionó con una suba contundente: la capitalización cripto global superó los USD 4 billones tras el anuncio.
Bitcoin, Ethereum y las principales stablecoins se revalorizaron, al tiempo que bancos como JPMorgan y Citi anunciaron que ya trabajan en sus propias monedas digitales ajustadas al nuevo marco.
Se anticipa un flujo creciente hacia bonos del Tesoro, dado que serán el activo de respaldo elegido por gran parte de los emisores de stablecoins.

El paquete regulatorio es más amplio

La Ley GENIUS no llegó sola. También se aprobaron dos normativas complementarias: la Ley CLARITY, que define reglas adicionales para el sector cripto, y la Ley Anti-CBDC, que prohíbe a la Reserva Federal emitir una moneda digital directa al público sin aprobación del Congreso.
Eso sí: las monedas digitales interbancarias seguirán permitidas.

Ley CLARITY: la pieza que faltaba 

La verdadera llave para ordenar el ecosistema llegó con la Ley CLARITY. Esta normativa complementa a la GENIUS y establece, por primera vez, un marco integral para los activos digitales en EE.UU.
La ley CLARITY elimina la zona gris entre tokens y valores tradicionales, diferenciando claramente tres categorías:

  • Los activos de inversión seguirán bajo la órbita de la SEC.
  • Los commodities digitales (como Bitcoin) quedarán bajo la CFTC.
  • Las stablecoins de pago estarán reguladas bajo el nuevo esquema GENIUS.

Además, se crea un régimen de “madurez de red”. Los emisores de tokens podrán pedir a la SEC certificar que su activo ya no representa un valor financiero, sino una infraestructura descentralizada madura. Esto responde directamente a casos como el de Ripple, donde la falta de definición generó años de litigios.

Safe harbor para innovación:

Los proyectos de blockchain podrán recaudar hasta USD 75 millones anuales por cuatro años sin ser considerados automáticamente valores. Esto permite un margen de desarrollo antes de quedar sujetos a la supervisión de la SEC.

Mandato a reguladores:

En un plazo de 180 días, SEC y CFTC deberán publicar reglas sobre estructura de mercado, conflictos de interés, custodia y márgenes.

Registro provisional:

Permite que exchanges, custodios y brokers se registren de forma provisional en la CFTC mientras se implementan las reglas definitivas.

Operativa DeFi y blockchain:

La ley facilita el uso de registros distribuidos y tecnologías blockchain para trading y liquidación, incorporando un marco que separa las responsabilidades sobre fraude y manipulación.

Impacto en el mercado y en la industria

  • La ley CLARITY reduce la ambigüedad regulatoria, un problema crónico del sector cripto en EE.UU.
  • Da seguridad jurídica a exchanges y desarrolladores de DeFi, que ahora cuentan con un esquema regulatorio funcional.
  • Favorece la atracción de capital institucional al ordenar las competencias entre la SEC y la CFTC, evitando arbitrajes regulatorios.

Análisis estratégico

Este paquete legislativo convierte a EE.UU. en el primer país en establecer un sistema dual y funcional para criptoactivos, donde el tratamiento depende del uso y madurez del activo.
La medida apunta a fortalecer al dólar digital y atraer al sistema financiero tradicional al negocio cripto, desalentando a que empresas busquen refugio regulatorio en otros países.

Además, EE.UU. busca adelantarse y superar el avance del marco regulatorio europeo MiCA, posicionándose como el líder normativo en cripto y finanzas descentralizadas.

Riesgos y contrapesos

  • La coordinación SEC–CFTC será clave: si no se alinean, podría haber duplicación burocrática o conflicto de regulaciones.
  • El nivel del cumplimiento regulatorio exigido puede dejar fuera a proyectos pequeños o startups sin espalda regulatoria.
  • El respaldo masivo en T-Bills para las stablecoins podría tener efectos secundarios sobre el mercado de bonos.
Las preguntas que abre el nuevo esquema

Aunque el mercado recibió la noticia con entusiasmo, el movimiento no está exento de críticas.
Algunos analistas advierten sobre el riesgo de una mayor concentración de poder financiero, ya que los grandes bancos tendrán ahora un rol dominante en el negocio de las stablecoins.
También preocupa la pérdida de descentralización, un principio fundacional del ecosistema cripto, y persisten dudas sobre los mecanismos de protección al consumidor y ciberseguridad.

Una jugada con trasfondo geopolítico

Más allá del mercado, la ley responde a un objetivo estratégico: reforzar el dominio global del dólar en la era digital.
Estados Unidos busca modernizar el sistema de pagos internacional, permitiendo transferencias casi instantáneas y con menor costo.
A la vez, la medida funciona como un contrapeso directo a los planes de desdolarización impulsados por los BRICS, que buscan alternativas al sistema financiero basado en el dólar.

¿Quién gana con esta ley?

Varios expertos coinciden en que Ethereum ($ETH) será uno de los principales beneficiarios en el mediano y largo plazo.
Las principales stablecoins institucionales se están construyendo sobre esta red, y la regulación podría acelerar ese proceso.

Plazos y próximos pasos

La Ley GENIUS entrará en vigor de forma plena en 18 meses, es decir, a principios de 2027.
Se abre un periodo de transición clave, donde los emisores deberán adaptar sus estructuras al nuevo marco.

Conclusión

El paquete compuesto por la Ley GENIUS y la Ley CLARITY institucionaliza el mercado cripto estadounidense bajo normas claras y controladas, pero no sin riesgos. El nuevo marco reduce incertidumbres, abre la puerta al ingreso masivo de bancos y fintechs, y fortalece el rol del dólar en la era digital.
Sin embargo, habrá que seguir de cerca la implementación práctica y el equilibrio entre innovación, control y concentración de poder.
Es un cambio estructural que requiere visión táctica y monitoreo constante.