El mercado laboral de Estados Unidos mantuvo cierta estabilidad durante junio de 2025, según revelaron los datos semanales de reclamos iniciales por desempleo (Initial Jobless Claims). A lo largo del mes, el promedio de nuevas solicitudes se ubicó en 236.500 por semana, lo que refleja una leve mejora frente al promedio de mayo, y sugiere que el ritmo de despidos continúa moderado, en línea con un mercado laboral que sigue mostrando señales de resiliencia.

El dato más bajo del mes se registró en la última semana, con 233.000 reclamos, cifra que superó las expectativas del mercado, ubicadas en torno a los 240.000. Por su parte, la media móvil de cuatro semanas —indicador clave para observar tendencias— cerró junio en 241.500, marcando una reducción frente a los 245.250 con los que se había cerrado mayo. Esta baja confirma una leve pero sostenida desaceleración en el número de despidos.

Sin embargo, el informe también arrojó señales mixtas. El promedio de reclamos continuos, que mide la cantidad de personas que siguen recibiendo beneficios por desempleo, se mantuvo elevado durante el mes, con un pico de 1,964 millones en la semana del 21 de junio. Este nivel es el más alto desde fines de 2021, lo que sugiere que, si bien se reducen los ingresos al sistema, aquellos que ya se encuentran desempleados podrían estar enfrentando mayores dificultades para reinsertarse rápidamente en el mercado laboral.

En conjunto, los datos de junio indican que el mercado laboral estadounidense sigue evitando una ola de despidos masivos, pero al mismo tiempo exhibe ciertas rigideces que podrían ralentizar la recuperación plena del empleo. Esta dinámica mantiene bajo control las presiones inflacionarias desde el frente laboral, pero también podría influir en las futuras decisiones de política monetaria por parte de la Reserva Federal.